Reconstrucción de Mano

Todos los días, los seres humanos estamos expuestos a sufrir accidentes en el área de trabajo o el hogar. Existen diversos oficios con alto riesgo laboral, ya sea por usar maquinaria, objetos punzocortantes, armas de fuego y tareas riesgosas. 

A continuación te doy algunos ejemplos de profesiones, oficios o trabajos en donde las manos corren un peligro latente de sufrir lesiones, laceraciones e incluso pérdida de tejidos blancos: tablajeros, electricistas, carpinteros, obreros, albañiles, operadores de maquinaria, entre otros. 

Dada la gran frecuencia de accidentes en manos, en donde las personas llegan a amputarse uno o varios dedos, es necesario tener el conocimiento sobre qué hay que hacer ante esta situación.

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¿Qué hacer ante una amputación de dedo?

Cuando estamos ante un dedo amputado, lo primero que tenemos que hacer es, buscar y cubrir el segmento con un apósito seco, introducirlo en una bolsa plástica, sellar correctamente y meter en un contenedor con hielo (isquemia fría). El dedo cercenado, nunca tiene que tener contacto directo con el hielo (isquemia caliente), esto es pieza clave para tener mayores probabilidades de éxito al momento de la reconstrucción, no sólo estética sino funcionalmente. 

Posteriormente, el paciente tiene que ser trasladado urgentemente hasta un hospital que cuente con todo el equipo necesario para realizar el implante. 

Una vez que el caso es atendido por un especialista, procedemos a realizar un correcto aseo en mano y segmento amputado, evaluamos el área afectada, damos el diagnóstico explicando los procedimientos a realizar, entramos al quirófano para la cirugía reconstructiva y en aproximadamente 4 horas veremos los resultados finales. 

Es necesario actuar de inmediato en las primeras 12 horas posteriores al accidente, de lo contrario, se puede presentar edema, infecciones, instalación de rigidez articular y otras complicaciones. 

Lo ideal es realizar el injerto en una sola intervención, pero de no ser posible, hay que definir una estrategia y actuar en la primera etapa. 

Una vez finalizado el proceso de reconstrucción, el paciente tiene que tomar rehabilitación casi inmediata para movilizar la mano, con un tiempo de recuperación de aproximadamente entre 5 y 6 meses, antes de continuar con sus actividades cotidianas. 

Sin duda, todos los casos son diferentes y cuentan con diversos grados de complejidad; el Dr. Pablo y todo su equipo de médicos, harán lo posible para que la reconstrucción y cirugía de mano sea exitosa.

Para mayor información, llena el formulario de contacto y atenderemos tu solicitud a la brevedad posible. 

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Dr. Pablo González Lomelín médico especialista en Ortopedia, subespecialista en Cirugía de la mano. Formación médica básica en la Universidad Nacional Autónoma de México.